Los países de todo el mundo se enfrentan al reto de una mayor demanda de atención a las personas con COVID-19, agravada por el miedo, la desinformación y las limitaciones de movimiento que perturban la prestación de atención sanitaria para todas las afecciones. Esta guía operativa de la Organización Mundial de la Salud recomienda medidas prácticas que los países pueden adoptar a nivel nacional, subregional y local para reorganizar y mantener con seguridad el acceso a servicios sanitarios esenciales de alta calidad en el contexto de la pandemia de COVID-19.