La Organización Mundial de la Salud recomienda que las decisiones sobre la oferta de la circuncisión médica masculina voluntaria (CMMV) a los adolescentes más jóvenes de entre 10 y 14 años se tomen tras considerar varios factores basados en las nuevas pruebas de seguridad, las orientaciones sobre derechos humanos, la carga para la salud pública y el impacto retardado en la incidencia del VIH, y la capacidad de los proveedores de atención sanitaria. Las consideraciones clave en materia de derechos humanos incluyen la capacidad y la madurez cognitiva del adolescente para dar su consentimiento informado y las funciones del personal sanitario en el proceso de consentimiento informado y en la prestación de servicios de CMMV adaptados a los adolescentes. Este artículo, publicado en larevista South African Journal of Psychology, analiza la madurez y la capacidad mental de los adolescentes para tomar decisiones sobre someterse a una intervención quirúrgica, a un tratamiento o a las pruebas del VIH, así como el modo en que los profesionales sanitarios podrían evaluar esa capacidad en Sudáfrica y en otros lugares.